[ 20-09-2016 ]
Solo vive en la península ibérica y no quedan más de 260 parejas, siendo el ave de presa más amenazada del continente europeo. El águila imperial sigue estando en una situación muy delicada, pero a principios de los 80 estaba prácticamente al borde de la extinción, con solo unas 100 parejas nidificantes en Andalucía y Castilla la Mancha y una mortalidad disparada.
En los últimos años la población se ha triplicado merced a un conjunto de actuaciones que ha conseguido alejar el fantasma de la extinción para esta especie única en el mundo. Como la adaptación de los tendidos eléctricos en el entorno de Doñana y Cabañeros, el refuerzo de la población de perdices, conejos y liebres en sus zonas de caza, la lucha contra el uso de cebos envenenados y la puesta en marcha del Centro de Cría en Cautividad de San Jerónimo (Sevilla), donde se recojen y preparan para su puesta en libertad ejemplares enfermos o abandonados. Pero además el centro ha desarrollado técnicas para la incubación, inseminación y cría en cautividad de la especie con indudable éxito: en 2004 empezó con 4 ejemplares y hoy ya dispone de 20 aves en su centro de cría. Mediante incubación artificial han nacido ya 8, de los que 6 han sido reintroducidos con éxito en su hábitat natural. Por otra parte el plan específico de recuperación que lleva a cabo el CSIC en el entorno de Doñana ha conseguido que en los últimos 3 años la producción anual de pollos se disparase desde 3 hasta 10 por año.
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