[ 28-12-2015 ]
Esta comarca anclada junto al Camino de Santiago y poco conocida fuera de Navarra fue territorio disputado entre sus reyes y los árabes, lugar de templarios, atajo de peregrinos, sus bosques sirvieron de escondrijo en la guerra de la Independencia y en las campañas carlistas a las partidas que lanzaban desde ellos sus escaramuzas.
Entre las piezas de su impresionante tesoro románico destaca la portada de la Ermita de San Pedro de Echano, una misteriosa representación cuya temática aún supone una incógnita entre los estudiosos. Lo mismo sucede con las extrañas pinturas que, junto a los murales góticos, adornan la basílica de Eristáin, en las afueras de Solchaga. Esta misma basílica aún recoge más enigmas como la pesada losa que sirve de altar donde se aprecia el dibujo de un sol o el pequeño tragaluz del frontis. En Iracheta podemos encontrar otra joya arquitectónica de la Valdorba: el hórreo de San Juan de Jerusalén, pequeño edificio civil del siglo IX, único en Europa. En Artajona, los bien conservados restos de lo que fue una de las más impresionantes ciudades amuralladas del Reino. Y en el centro de Orísoain puede visitarse otro lugar con encanto y misterio medieval: la diminuta cripta de la parroquia de San Martín.
Además de este paseo por las luces y las sombras de la Edad Media, el visitante también puede sacarle provecho a la zona con otras alternativas igualmente interesantes, como los "itinerarios micológicos" señalizados en algunas localidades, para los amantes de las setas, o la Feria de la Trufa, que atrae todos los años a miles de personas y a renombrados cocineros. La Valdorba, además, cuenta con el mayor coto de caza controlado de la península, donde se pueden cazar codornices, faisanes y perdices criadas en cautividad o si se prefiere, practicar tiro con arco.
Son muchos los puntos de interés artístico en La Valdorba, pero tal vez lo que convierte el conjunto en especialmente atractivo es el hecho de que iglesias, puentes, molinos, palacios, cruces… estén enclavados en un paisaje poco frecuente por lo apacible y turísticamente nada masificado. A riesgo de abusar del tópico se puede afirmar que la Valdorba es uno de esos lugares que han sabido conservar su personalidad y autenticidad, siendo ese su mayor encanto.
Más info de casas rurales y turismo rural en la zona en Guiarural.com
ETIQUETAS: Valdorba, casas rurales, Navarra, románico, turismo rural